diumenge, 23 de setembre del 2007

El coste de la vuelta al cole

El otro día sentí en la radio que el coste de la vuelta al cole es de aproximadamente 500 € por alumno. Como profesor de secundaria siempre me interesa todos los temas referentes a mi profesión. Los comentarios que se hacen sobre la noticia son del tipo: es un golpe duro para las economías familiares y se acaban concentrando en el coste de los libros de texto.

De entrada no estoy de acuerdo que los dineros que se gastan en educación sean un coste, sino más bien una inversión de futuro. Si el objetivo es la educación de tus hijos y que el día de mañana tengan suficiente formación para poder desarrollar la carrera profesional que ellos deseen tampoco me parace que sean tantos dineros. Si lo comparamos con otros gastos familiares, la educación es de los más bajos. Pongamos algunos ejemplos y hagamos números.

1. El coche: una familia que compre un coche de unos 15.000 € y que les dure 10 años, le saldrá por 1.500 € de coste anual de amortización. Si añadimos 300 € de seguro y otros 300 € de mantenimiento, sin contar el coste de la gasolina, y hacemos la suma, sale un gasto anual de 2.100 € (4 veces más que en educación). Si el coche es de 25.000 € serían 3.100 € (6 veces más). Alguien podrá decir que el coche es necesario y puede que tenga razón, pero la educación es fundamental.

2. La mayoría de los alumnos de secundaria tienen móvil y no cualquier móvil. Si les preguntas un poco más, muchos tienen consola, televisor, video, etc., etc., y visten ropa y zapatillas de marca. Una anécdota que me pasó el curso pasado, un alumno no me trajo un disquet durante todo el curso (valorado en 30 cm) pero sí traía la PSP (200€).

El problema no radica en lo que cuesta la vuelta al cole, sino la prioridad que damos a la educación de nuestros hijos. Muchas familias no piensan en la escuela como el lugar donde sus hijos aprenden y se preparan para el futuro, sino el lugar donde los dejo aparcados para poder ir a trabajar. Se que hay familias que, por su situación económica precaria, no pueden afrontar este gasto, pero son pocas y para estas situaciones extremas se tiene que articular un buen sistema de becas que ayuden a las familias más humildes y a los alumnos para que saquen buenas notas que, al final, son los grades olvidados del sistema educativo.

Armas que desaparecen

Según una noticia aparecida en el diario “Avui” que decía que “Los Estados Unidos han perdido el rastro de 190.000 armas de fuego entregadas a las fuerzas de seguridad iraquianas desde el inicio de la ocupación en el 2003, según ha reconocido un informe oficial realizado recientemente por un organismo dependiente del Congreso norteamericano”.

Según continua explicando la noticia, las armas pueden haber ido a parar a las milicias o al mercado negro. Podríamos decir que, en lugar de perder las armas, alguien o algunos han estado haciendo el agosto con ellas, pero eso sí, por el bien de la patria. A veces da la impresión de que muchos de aquellos que se llenan la boca de patriotismo, siempre acaban sacando provecho propio o, dicho de otra manera, el patriotismo es la excusa para aprovecharse de la patria.

Los soldados norteamericanos están siendo atacados con armas que su propio país a proporcionado a las milicias que luchan contra la ocupación americana, ¡qué fuerte!, ¿no?. Cada vez está más claro que los intereses de algunos privilegiados en la sombra del estado, han marcado esta guerra desde el principio. El petróleo, la industria armamentística y otras empresas han propiciado una auténtica masacre en Iraq y una catástrofe humanitaria sin precedentes. Lo peor de todo es que la sociedad occidental continua sin reaccionar contra esta cadena de despropósitos.

Yo me planteo si es admisible la existencia de una industria armamentística. No planteo ahora la desaparición de los ejércitos, que sería la mejor solución a la violencia que vivimos, pero sí la desaparición del interés del mercado en la fabricación de armas. Tendrían que ser industrias estatales sin ánimo de lucro las que las fabriquen porque sinó la industria actual buscará mercados como si de vender teléfonos se tratara. Si no hay mercado, lo fabrica artificialmente potenciando conflictos armados enquistados y haciendo negocio con las dos partes implicadas. Se podría dar la paradoja que una empresa norteamericana de armamento le interesara que “el enemigo” tuviera armas y balas para disparar, porque sinó los soldados no tendrían que gastar balas y material bélico, de hecho, el negocio es el negocio. Si complementamos nuestro negocio fabricando las bolsas de plástico donde colocar los soldados caídos en combate y con el material sobrante de la fabricación de armas hacemos medallas que nos compraran para honorar a los muertos, podríamos decir que el negocio es redondo.

divendres, 14 de setembre del 2007

El calendario escolar

Ya se han acabado las vacaciones escolares y los padres podrán dejar de hacer cabriolas para conseguir colocar a sus hijos para poder ir a trabajar. Por este motivo cada año se habla de la posibilidad de modificar el calendario escolar para adaptarlo a las necesidades de la sociedad actual.

Yo, como profesor de secundaria, no mantengo una postura objetiva sobre el tema ya que, una modificación del calendario escolar supondría una modificación de mi calendario personal. Por eso intentaré no pronunciarme al respecto, peró sí hacer unas reflexiones.

Primero de todo, hay que recordar que la jornada laboral en nuestro país es de 40 horas semanales. Ya sé que a muchos de vosotros os hará mucha gracia este comentario, ya que muchos pensáis que nadie hace 40 horas, menos yo, claro está, y posiblemente sea cierto, pero no tenemos que perder este dato como referencia. Un alumno de secundaria hace aproximadamente 30 horas de clase a la semana. Hay que añadir un par de horas de deberes diarios, porque señores, vuestros hijos tienen deberes aunque ellos digan lo contrario, y si no os lo creéis, mirad sus agendas. Sólo con esto ya suman 40 horas y ya han cumplido con el horario laboral de un adulto (aunque ellos no son adultos). Pero muchos de ellos también realizan actividades extraescolares como música, lenguas, dibujo, danza, deportes, etc. podríamos decir, entonces, que un alumno hace entre 44 y 50 horas a la semana de actividades. Creo que, queda claro que, no se les puede pedir mucho más, a no ser que queramos que padezcan, de forma precoz, las enfermedades que los adultos padecen en esta sociedad moderna.

La segunda reflexión que me hago es ¿sobre qué parámetros nos tenemos que basar para decidir la dedicación horária y el calendario escolar?. ¿Sobre los intereses de los docentes?. ¿De los padres?. ¿De los alumnos?. No perdamos de vista que un centro escolar es un lugar dedicado a la educación y el aprendizaje de nuestros jóvenes y, por lo tanto, toda reducción o disolución de estos objetivos en otros como el aparcamiento de los jóvenes perjudica grávemente, no sólo la imagen del sistema educativo, sinó también su eficacia.

¿Para qué que queremos más carga lectiva? ¿Quéremos que hagan más horas de matemáticas?, ¿de lengua?, ¿de informática?. ¿Por qué siempre se habla del calendario, pero nunca del uso que se hará del tiempo?. La sexta hora en la educación primaria es un claro ejemplo de todo esto. Todos nos dicen que es fantástica, óbviamente los políticos responsables del Departament d’Ensenyament ¿qué queréis que os digan?. Pero nadie nos dice por qué lo es. Con esta hora se pueden hacer idiomas, ciencias o jugar a las cartas, eso sí, dentro de la escuela y bien aparcaditos. El problema que yo tengo es que no me fio de nadie que, al diseñar esta sexta hora, se olvidó de comprobar si tendría suficiente personal para poder aplicarla correctamente (este cálculo se hace sumando, tampoco os creáis que hay que ser un iluminado) y no como pasa siempre en este departamento, que las incompetencias siempre las acaban padeciendo los que trabajan en las trincheras, en este caso, los profesores, sacando las castañas del fuego con voluntarismo.

Para los que no tenéis la suerte o la desgracia de saber como funciona el Departament d’Ensenyament, sólo os daré un dato. La publicación en el DOGC de los nuevos currículums que se tienen que aplicar este septiembre se publicó el 29 de junio, cuando todos los libros de las editoriales ya estaban en el mercado (con el contenido basado en el borrador del currículum). Bien, no os explicaré más anécdotas, de momento, porque seguro que luego tendrías pesadillas con el tema.

Finalmente, no hay que olvidar dónde vivimos. En este país, a partir del mes de junio las temperaturas son demasiado altas para poder realizar una tarea docente en óptimas condiciones y os puedo asegurar que un adolescente es un auténtica estufa, imaginaros 20 ó 30 juntos. Si alguien está pensando en el aire acondicionado, permitidme que me ría un poquito, los únicos aires que hay están en los módulos prefabricados ya que sin ellos es como estar dentro de un horno eléctrico doméstico pero tamaño XXL.

Aunque parezca clara que la prioridad son los chicos y chicas, los que votan son los padres y, por eso, muchas decisiones son tomadas pensando en rendimientos electorales y no en medidas que pretenden mejorar el sistema educativo y su formación.

Si hay que modificar el horario escolar, se ha de hacer después de una reflexión profunda y con unos objetivos claros y no después de una comida de trabajo con café y copa.

dilluns, 10 de setembre del 2007

Clientes y compañías de móviles

El primer mandamiento de una empresa es mimar a sus clientes para conseguir su fidelidad. O almenos eso era lo que yo pensaba. Yo soy cliente, seguramente no de los mejores, de Vodafone, desde hace más de cinco años y, desde hace unos meses, estoy observando el comportamiento de las compañías de telefonía móvil con respecto a sus clientes. Mi conclusión es que hacen mejores tratos a los clientes de la competencia que a los suyos propios. Esto es debido a unas campañas agresivas de captación de clientes, sin tener en cuenta el agravio comparativo que padecen los que ya son clientes. La solución es sencilla, jugar a su mismo juego: a partir de ahora, cuando quiera cambiar de teléfono móvil, cambiaré de compañía. Con este método puedes cambiar de móvil cada 18 meses y si no buscar ir a la última en teléfonos hasta te pueden salir gratis. En resumen, las compañías quitan clientes a la competencia a costar de perder parte de los suyos y el usuario espabilado puede aprovecharse de la situación siempre que no sea fiel a ninguna compañía. Yo recomendaría a las compañías que se dediquen más a difelizar a sus clientes con unos precios más competitivos y seguro que a la larga saldrán ganando. En este sentido, quizás Yoigo es la que tiene una estrategia de màrqueting diferenciada del resto. Aunque es de las más recientes, habrá que esperar a ver qué tipo de ofertas ofrece.

Hipotecas de alto riesgo

En los últimos años, en los Estados Unidos, se han puesto de moda las hipotecas de alto riesgo. Bien, no se si la palabra de moda es la más adecuada. Por un lado están los usuarios, que, de hecho, no desean este tipo de hipotecas, pero que no tienen otro remedio que acudir a esta posibilidad para conseguir un préstamo. El perfil del cliente de estas hipotecas los llamaremos pobres. Estos pobres son personas que no pueden aportar avales o garantías suficientes para garantizar la devolución de los préstamos “normales”, a cambio de pagar un tipo de interés totalmente desorbitado por no llamarlos por su verdadero nombre. Los que consiguen estas hipotecas de alto riesgo los llamaremos pobres desgraciados, para entendernos. En el otro lado están los emprendedores visionarios que montan una empresa para forrarse a costa de las desgracias de los otros, en este caso, de los pobres desgraciados. Las ganancias son realmente astronómicas gracias a los tipos de interés tan altos. A este tipo de emprendedores, por llamarlos de algún tipo, los llamaremos espavilados, para entendernos. Como que la cuenta de resultados de estas empresas es espectacular, otras empresas, bancos y otros inversores quieren participar del festín, como buitres volando alrededor de los pobres desgraciados económicamente moribundos. Todos invierten en estas empresas y comienzan a engordar sus ganancias en una autentía orgía capitalista neoliberal. A estos últimos los llamaremos ricos, para entendernos.

Si lo miramos objetivamente, desde el punto de vista de una economía capitalista salvaje, el negocio de las Hipotecas de alto riesgo es plenamente legítimo. Los espavilados arriesgan su capital, con un negocio de alto riesgo, ya que hay una probabilidad alta de que los pobres desgraciados no puedan devolver nunca el dinero debido a los intereses que tienen que pagar. A cambio, el espavilado puede conseguir grandes beneficios proporcionales al riesgo que corren. Por otro lado, el pobre desgraciado también corre con un gran riesgo aceptando este tipo de hipotecas, pero es su única posibilidad de poder tener acceso a unos dineros que le pueden cambiar su vida, aunque normalmente será para peor. Los que escapan de la merienda de los buitres podrán mejorar su calidad de vida. Hasta aquí, de forma objetiva, nada que decir.

La situación económica de los Estados Unidos y el mercado immobiliario se ha resentido mucho. El riesgo que corren los espavilados ha aumentado mucho y las empresas han entrado en fuertes pérdidas, cayendo en picado los precios de sus acciones y afectando a los ricos que habían invertido sus dineros en este negocio. Como que el mercado es global, este efecto se estiende a las bolsas de todo el mundo. Imaginaros que los espabilados no podrán cambiarse el Ferrari que ya tiene dos años y el pobre está ya muy viejito, ni comprarse un jet privado más grande, ni una isla para pasar las vacaciones alejados de la chusma y de los pobres desgraciados. Por lo que respecta a los pobres desgraciados, muchos pierden la propiedad que habían adquirido con el préstamo y en la mayoría de los casos pierden todo lo que tenían quedándose en una situación muy precaria de pobreza absoluta. De forma objetiva, nada que decir, es el sistema capitalista y de libre mercado (unos ganan y otros pierden).

Lo que me rompe los esquemas, de lo que me han explicado del sistema capitalista, que habla de libertad en los mercados, de la ley de oferta y la demanda y de la autoregulación de los mercados es que, el Banco Central Europeo ha inyectado 300 millones de euros para compensar las caídas del mercado y tranquilizar a los ricos y a los espabilados. Este sistema capitalista en el que todos jugamos, ya no es objetivamente correcto, sino que es un juego en el que todos podemos jugar, pero en el que sólo ellos pueden ganar, y me refiero a los ricos y a los espabilados. ¿Dónde estaban los Bancos Centrales de todo el mundo cuando los pobres se convertían en pobres desgraciados por no poder obtener una hipoteca decente?. Los espabilados y los ricos, se han estado enriqueciendo a costa de la degracia de los más desfavorables con una desverguenza y una indecencia que no encuentro la palabra para definirlos, ya que indeseables la encuentro demasiado suave. Pero cuando sus beneficios se encuentran en peligro, se inyecta dinero de forma artificial para que no puedan perder, dinero de todos, de los europeros en este caso, europeos espabilados, ricos, pobres, pobres desgraciados y el resto, los supervivientes. Podemos concluir que las hipotecas se llaman de alto riesgo por el riesgo que corren los pobres desgraciados que se ven empujados a contratar una y no al riesgo de los espavilados que, como vemos, es práctiamente nulo.

dimecres, 5 de setembre del 2007

La campaña electoral

Nunca me han gustado las campañas electorales, lo tengo que confesar, y cada vez me resulta más difícil soportarlas y creo que no soy el único. Si tenemos en cuenta que las campañas oficiales duran quince días, yo me hago las siguientes preguntas: Si 15 días todavía no has decidido tu voto, cuando has tenido muchos meses, por no decir algunos años para ir siguiendo la política, las acciones de cada uno de los candidatos y de hacerte una idea aproximada de la situación política, ¿lo harás en tan poco tiempo? ¿Qué esperas que te digan 15 días antes? ¿Lo que piensan? ¿Lo que les interesa?

Lo que encuentro intolerable es que las campañas, encubiertas, duren siempre y no se acaben nunca. Es como si fuéramos a trabajar cada día, y nos pasáramos parte de las horas de trabajo buscando uno nuevo para cuando se nos acabe el actual contrato. Una vez han ocupado sus cargos después de unas elecciones, tienen la obligación de dedicarse a trabajar, sobretodo si tienen la intención de complir todas las promesas que han hecho, hasta 15 días antes de las próximas elecciones. A cambio, les damos este tiempo para que nos expliquen lo que han hecho (por si acaso no lo hemos visto), lo que piensan (por si acaso no los hemos escuchado), lo que quieren hacer en el futuro o senzillamente para que nos tomen el pelo como suelen hacer casi siempre.

Se han acostumbrado a que sus promesas electorales se hagan a partir de estudios de mercado, como si se trataran de productos de consumo, y no de lo que realmente piensan que pueden hacer. La idea es decir lo que queremos sentir y no sí lo podran realizar. Una vez han conseguido nuestro voto y su despacho, automáticamente todo el discurso que han ido realizando se comienza a matizar hasta que se acaba disolviendo, como el azucar en el agua. Tendríamos que exigir que en lugar de promesas firmaran un contrato comprometiéndose a realizar todo aquello que dicen, con cláusulas de penalización, en caso de no hacerlo.

Hoy en día, la mayoría de los partidos políticos dicen estar a favor de la preservación del medio ambiente, pero cuando llegan las elecciones todos empapelan el país, sin tener en cuenta el despilfarro y perjuicio que esto supone, aunque para compensar impriman en papel ecológico. Yo, particularmente, busco un partido que no enganche papeles, que no haga grandes escenificaciones, ni grandes promesas, y que no necesite dineros del gran capital o de subvenciones para financiar las campañas que, después, actuarán como limitadores de sus libertades, hasta convertilos en simples marionetas. Ya lo sé, busco una quimera, aunque de momento, hasta que no lo encuentre, este partido se llama voto en blanco.

Para acabar, decir que encuentro muy injusto que los partidos que no tienen representación no puedan disfrutar de espacios públicos para darse a conocer. Ya se que sería muy complicado, ya que se pueden llegar a presentar muchos, pero continua siendo poco democrático, desde mi punto de vista, ya que perpetua a unos partidos políticos y deja fuera a otros, dando voz a unos y no dejando hablar a otros.

dimarts, 4 de setembre del 2007

Abriendo barreras

Este sábado se ha producido un hecho extraordinario: las barreras del peaje de Tarragona y El Vendrell se han abierto, para dejar paso a los vehículos que, pacientemente, hacían caravana (sólo 70 km y porque no había más de kilómetros) para superar este obstáculo costoso. De hecho, parece ser que es la primera vez que sucede una cosa como esta. La explicación dada por los entendidos en la materia es que ha sido un auténtico milagro, obra de poderes divinos. Esta teoría no es ninguna locura, ya que, nunca se habían abierto las barreras, a excepción de los casos en que depositas el correspondiente donativo, aunque hace muchos años que la gente se muere de asco esperando a superar el peaje. Todo y esto, yo tengo una teoría no menos sorprendente. La verdad es que todavía no he reunido todas las pruebas para demostrar mi tesis, pero os haré un avance en primicia. Creo que Cataluña tiene un nuevo servicio de inteligencia a la altura de los países más desarrollados del mundo y sólo superado por los servicios de inteligencia norteamericanos. Aunque se ha mantenido en secreto, ya hace años que trabaja en la sombra. De hecho, durante unos años en este país, ya hubo un gobierno en la sombra, ¿por qué no un servicio de inteligencia?

Después de disponer de unos medios humanos y técnicos extraordinarios y reuniendo los cerebros más privilegiados del planeta, han podido descubrir, finalmente, el enigma sobre los embotellamientos de tráfico en Cataluña. La pregunta que habría que responder sería, ¿Quién pone palos a las ruedas de los coche, para que no puedan circular sin retenciones? No son palos, son barreras.

Tener que pagar peajes me parece impresentable, pero ya hablaré de esta cuestión en otro momento, pero pagar para hacer caravana, es inadmisible. Supongo que la autopista se paga para obtener un servicio, aunque creo que no está definido en ningún sitio. Pero, como mínimo, se tendría que poder circular, ¿no? Cuando este servicio no se da, ya que hacer muchos kilómetros de caravana no es circular, no se tendría que pagar. Además, tendría que existir una norma que regule este servicio y podría establecer que, en caso de más de un kilómetro de cola, automáticamente se abra el peaje. Ya veríais como en poco tiempo se ampliaba el peaje de Tarragona.